¿Cabe un horno en un FIAT 500?
Breve historia de un sueño ‘Alla Italiana’
Debe ser difícil transportar un horno de pizza en un coche tan pequeño. Sin embargo ese fue el comienzo de un sueño que, desde hace más de tres décadas, ha acercado el mejor sabor de Italia a miles de clientes.
En 1972 Sergio Bracci, un joven italiano amante de la buena mesa, se sintió llamado por los encantos de la Costa del Sol. Con apenas cinco mil liras, un horno y un pequeño Fiat, emprendió camino hacia la localidad malagueña de Fuengirola, donde la inauguración de un pequeño local, de inconfundible sabor italiano, se convirtió en todo un evento.
Cada día, cientos de clientes hacían cola para disfrutar de los mejores platos de la gastronomía de Italia cocinados con las auténticas recetas de ‘La Mamma’. Unas recetas que acompañaron a los fundadores desde su pueblo natal en Italia, Matelica.
Con el paso de los años, la gran familia italiana fue creciendo. Paolo el hermano de Sergio alegraba las noches con sus viejas canciones napolitanas. También llegó Silvio con su familia.
Desde Sicilia, la familia Zanca se asentó en Fuengirola y aportó su amistad y los auténticos sabores del sur.
También llegaron Lello, Deccio, Lino, Carlo Tacconi, Nicola… y la aventura se repitió en las principales ciudades de Andalucía y el resto de España.
Los años ochenta llegaron y la familia siguió aumentando con la apertura de nuevos restaurantes en Málaga, Córdoba, Sevilla, Cádiz, que continuaron la tradición. Las mejores recetas en el mejor ambiente italiano. En los restaurantes del grupo se citaban en aquella época los personajes más populares del mundo de la cultura y el espectáculo. Todos sabían que la verdadera cocina y la mejor compañía se encontraban en un restaurante ‘O Mamma Mia’
Llegaron nuevos retos y la cadena se extendió hacia Madrid, Extremadura, Murcia y otras localidades donde se repitieron los éxitos de anteriores aperturas. La pequeña Pizzería se convirtió en un grupo presente en España que ha sabido mantener todo el sabor y el color que en su día soñaron desde Italia.
La etapa actual es de la nueva generación: Desde Málaga, Leonardo Silvi Bracci, y Mauro Bracci garantizan la tradición
Gracias a todos los que han confiado en nuestra ilusión, los platos de los restaurantes ‘O Mamma Mia’ siguen destacando por la fidelidad a las recetas originales y a las materias primas más selectas. El resultado: una cocina auténticamente italiana. Nuestra familia en Italia no nos habría permitido hacer otra cosa.
Ahora bien, Cómo Sergio Bracci logró subir el horno en el pequeño Fiat aún sigue siendo un misterio.